llamado
Guillermo Delicias
tuvo relaciones con Rosa Florida
perdió la Confianza
y se caso con Estrella.
Tuvieron tres hijas
que fueron Alhambra,
Diana y Alianza.
(Poema Tradicional Alicantino sobre
los Balnearios del Postiguet)
Ferrocarril y baños fueron dos conceptos modernos y, en cierta medida, interdependientes. El ferrocarril era la imagen del progreso, de la velocidad, de la exactitud, de la movilidad, de una nueva forma de viajar a destinos desconocidos; el baño de mar era sinónimo de salud, de higiene, de deporte, esparcimiento y relación social. A partir de 1830, tras la aparición del ferrocarril en Europa, todas las compañías explotadoras de Caminos de Hierro ofertan viajes directos a las estaciones balnearias. Incluso las típicas Guías de Ferrocarril, que nos dan una visión rápida de las ciudades y monumentos de las poblaciones que atraviesan, nunca dejaban de citar estos establecimientos. Alicante fue la primera ciudad costera comunicada por ferrocarril con la capital española (1858), lo que supuso el inicio de la actividad turística en la zona, la nueva apertura al mar y la proliferación de los balnearios. Neptuno, La Alianza, Diana, Las Delicias, eran algunos de los nombres de las populares casas de baños a las que los turistas acudían para alojarse y disfrutar de sus días en la playa. Gracias a la crónica que envió un turista inglés al diario Times, sabemos que el bullicio comenzaba desde bien temprano, que para acceder al baño existía una separación entre zona para hombres y zona para mujeres, o, que tras la comida, todo el mundo aprovechaba para descansar y echarse la siesta. Los balnearios mantuvieron todo su esplendor hasta 1938, cuando varias bombas los destruyeron, reduciéndolos a simples pilares de madera sobre la playa. Solamente dos de ellos volvieron a resurgir de sus cenizas: La Alianza y La Alhambra. Ambos continuaron en funcionamiento hasta 1969, año en el que fueron expropiados por el Ayuntamiento debido a las remodelaciones de la zona.
Las casas de baños consistían en sencillas construcciones en madera de una planta, que se adentraban en el mar a modo de plataformas cubiertas sobre pilotes enclavados en el lecho marino. Solían tener distribuciones similares, bien con planta longitudinal y largos corredores en torno a un hueco central, al que volcaban las estancias independientes para el baño, o bien con planta en forma de cruz. Se montaban para la temporada de baños y se retiraban cuando la época estival llegaba a su fin. Ofrecían al bañista todo tipo de servicios, no solo para la puesta en práctica de la talasoterapia, sino también para amenizar las horas de asueto. En torno a estos establecimientos se desarrollaron toda una serie de actividades complementarias que modificaron la fachada marítima de la ciudad. Se abrieron nuevos hoteles y restaurantes para dar servicio a los visitantes y se realizaban conciertos, ferias o teatros al aire libre para amenizar el tiempo de ocio una vez acabada la hora del baño.
En la postal de la derecha se puede ver lo que quedaban de los balnearios a principios de los años 60 del siglo pasado. Debía tener seis o siete años cuando acudí con mi familia a uno de ellos, las chicas nos cambiamos en un pequeño vestuario y nos tiramos al mar por una estrecha escalera. Recuerdo la extraña sensación que tuve al meterme en el agua turbia llena de algas que se adherían a mi bañador como si fuesen sanguijuelas. Acostumbrada a bañarme en playas abiertas y piscinas, la experiencia no me resultó agradable. No repetimos.2. Estación de Villena (Compañía de Ferrocarriles MZA)
3. El Chicharra, desaparecido tren de vía estrecha de la VAY(Villena, Alcoy, Yecla)
4. Orígenes del turismo popular: El "Tren botijo" Madrid- Alicante (1893-1927)
Para saber más
Viajeros hacia el mar: Los balnearios.
Olga Grao-Gil, Construcciones efímeras en madera: los balnearios de la fachada marítima de Alicante (siglos XIX y XX).
Tomás Mazón Martínez, Orígenes y desarrollo turístico en Alicante: del veraneo al turismo de masas .
Vera Riumbau, Huellas del turismo en la Costa Blanca.