Los preceptos de cortesía y decoro llegan a los escolares en forma de manuales, tratados o cartillas, o como complemento de los libros de lectura como hemos visto en entradas anteriores. Los libros presentan los contenidos de la disciplina bien por el sistema de pregunta-respuesta como en el catecismo. utilizado en Breve tratado de urbanidad para las niñas ( Paluzie,1884) de Pilar Pascual, bien a modo de máximas o preceptos, a veces en forma versificada y, otras veces, con viñetas ilustrativas que favorecen el aprendizaje.
El presbítero y profesor de instrucción pública, D. José Codina redactó en la primera mitad del siglo XIX varios textos breves de urbanidad adoptando la forma versificada –un procedimiento didáctico muy adecuado para la memorización del texto– que gozaron de una gran aceptación a lo largo de muchas décadas con innumerables reediciones. El Tratado completo de urbanidad en verso para uso de los jóvenes, ilustrado con notas sobre el modo de producirse cortésmente (Barcelona, 1838), y el Tratado completo de urbanidad en verso para uso de las niñas (1838). Los dos tratados de unas 60 páginas sin grabados son obras breves escritas en octavas. Al final se incluyen unas 100 preguntas relativas al texto que precede. A pesar de que se dice que el texto está escrito en octavas, más parecen octavillas, la octavilla es una estrofa de ocho versos de arte menor formada por dos redondillas en la que una de las rimas se repite en la segunda de ellas (rima consonante -aab-ccb).
Tratado Completo de Urbanidad en Verso by Antonio Lorenzo
Paras saber más
- Almanaque: Códigos sociales de urbanidad y de buenas maneras [I] (adarve5.blogspot.com) Un recorrido histórico por los libros de urbanidad.
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