Equilicuá es una expresión que etimológicamente viene del italiano "eccolo qua!" que podríamos traducir como "helo aquí" o "aquí está", que a su vez vendría del latín, a partir de ecce (he aquí) y del relativo qui, quae, quod. Similar al famoso “eureka” de Arquímedes en griego. También se usa para reafirmar lo dicho, en este sentido un sinónimo sería "exacto". Equilicuá no está catalogada en el DRAE.
Equilicuá da título a un cortometraje de Ignacio F. Rodó, finalista del VI Concurso de Cortos RNE (Edición 2014). El cineasta nos presenta a dos jóvenes intelectuales en su primera cita, que utilizan una copa de vino y unos pocos latinismos para romper el hielo. Una vez más se demuestra que la lengua muerta está muy viva.
Y es que el latín durante muchos años fue la lengua de nuestro acervo cultural transmitido a través de las lenguas romances. El emperador políglota Carlos V declaró: «Hablo español a Dios, italiano a las mujeres, francés a hombres y alemán a mi caballo". Valle-Inclán en su obra de teatro Divinas palabras, ya ironizaba con el poder de fascinación de las palabras latinas que no eran entendidas por el pueblo.
El corto me ha recordado la película Un pez llamado Wanda, donde Jamie Lee Curtis se excita sexualmente al escuchar hablar otro idioma, lo entienda o no. Este fetiche se conoce con el nombre de xenoglosofilia. Para mayor claridad copio los enlaces para ver los fragmentos de la película donde esto ocurre:
https://www.youtube.com/watch?v=6zquYbMbFNk&ab_channel=Movieclips
https://www.youtube.com/watch?v=x6ajz49Ncq4&ab_channel=JaneWilson
Para saber más: Frases de amor en latín para enamorar como lo haría un poeta filósofo.