martes, 31 de diciembre de 2024

Coro Al Alba, Nana urgente para Palestina


Para terminar el año un villancico-nana que el coro Al Alba interpretó en la sede de la Comunidad de Madrid (antes DGS* y, mucho antes, Casa de Correos) el 26 de diciembre. Una versión de la Nana Urgente para Palestina del cantante Marwan, hijo de padre palestino y madre española. Un canto suave a una tierra que nunca ha estado dormida, pero a la que, en los últimos meses, el sonido de las bombas ha querido silenciar.
Como afirma mi amigo Guillermo, tenor del grupo, esta nana es un grito en defensa de los palestinos de ahora que llevan décadas soportando la violación constante de sus derechos y un deseo de navidad para que se acaben todos los conflictos bélicos del mundo. En Palestina, en Ucrania, no hay noches de paz.

*Este edificio, situado en Puerta del Sol, fue escenario de torturas, encarcelamientos y persecuciones de carácter político entre 1939 y 1979, cuando lo ocupaba la Dirección General de Seguridad (DGS). En la acturalidad se mantiene la pugna entre el gobierno nacional que quiere señalar el inmueble como lugar de memoria histórica con motivo del 50º aniversario de la muerte de Franco y el regional que rechaza la propuesta.


SoportéLas cosas que nadie soportaLa pena del que a nadie importaY todavía sigo en pie
SoportéEl vientre de la artilleríaEl fuego en la guarderíaY todavía sigo en pie
No puedo hacer una canción de pazSi no me puedo ni moverNo puedo hacer una canción de pazSi no me puedo ni mover
SoportéEl miedo atroz entre las mantasQue todos me dieran la espaldaY todavía sigo en pie
Recuerda bienQue no hay rumor que me definaTodos me llaman PalestinaY todavía sigo en pie


domingo, 22 de diciembre de 2024

¡Feliz Navidad!: La vida vive y de continuo perece y renace


Peter Hassell, 2024

Para no faltar a la costumbre, como todos los años, os reenvio la felicitación de Peter Hassell acompañada de una máxima latina y de un artículo de Manuel Vicent. 

 VITA VIVIT IVGITERQVE PERIT ET RENASCITVR

                                               Anónimo

        (La vida vive y de continuo perece y renace)


El sabio y sagaz escritor Manuel Vicent, en Divagaciones ante un turrón de coco, nos recuerda que en esencia nada ha cambiado en nuestra cultura desde la época de los romanos.

"Hoy, sábado 21 de diciembre de 2024, a las tres de la madrugada en el hemisferio norte se ha producido el solsticio de invierno. La luz del sol ha empezado a crecer y así lo hará hasta que llegue el verano. Los antiguos romanos celebraban este acontecimiento con las Saturnales, unas fiestas paganas en honor a Saturno, el dios de la agricultura y la cosecha, y que originalmente transcurrían entre el 17 y el 23 de diciembre.
Los romanos también montaban mercadillos en el foro y por allí andarían Horacio, Ovidio y Virgilio comprando regalos, velas, figuritas de barro y dulces tradicionales para amigos y parientes. Por una vez los esclavos se sentaban a la mesa y eran servidos por sus amos, como sucede en la película Plácido, de Berlanga. Las fiestas estaban presididas por la alegría de los niños y por la nostalgia de los ancianos. Como pasaba con la luz del solsticio, unos llegaban a la vida y otros la abandonaban.
De pronto la luz del sol se irá apagando y cuando llegue la noche de san Juan con el solsticio de verano todos nuestros sueños de luz habrán vuelto a empezar o habrán terminado. Estas son divagaciones ante una bandeja de turrones de Navidad".

jueves, 19 de diciembre de 2024

Las paredes oyen: Hay ropa tendida/ moros en la costa/ pájaros en el alambre


La lengua castellana recoge expresiones que nos animan a tener cuidado con lo que se dice. Las paredes oyen, hay moros en la costa, hay ropa tendida y hay pájaros en el alambre son algunas de ellas. Suelen ir introducidas por la advertencia ¡Cuidado! y sirven como contraseñas para indicar al interlocutor que alguien puede estar escuchando y no nos conviene. Los espías pueden ser funcionarios de prisiones, niños o enemigos; los temas, variados: secretos, cotilleos, temas de naturaleza sexual, críticas, complots políticos...

Las paredes oyen 

Las paredes oyen se usa como una advertencia para mantener en secreto lo que se está diciendo. El dicho viene del siglo XVI, cuando Catalina de Medici, reina de Francia, mandó construir en las paredes de sus palacios unos conductos acústicos que permitían oír lo que se hablaba en las diferentes habitaciones para así saber si se conspiraba en su contra. Cuando de pequeña oía la frase me imaginaba a una persona con la oreja pegada a la pared o con un vaso para amplificar los sonidos del otro lado del muro. También dio título a una obra de teatro de Juan Ruiz de Alarcón donde cuestiona la mentira patológica y la maledicencia compulsiva del personaje de Don Mendo, quien para conquistar a Ana pretende injuriarla. 

Hay moros en la costa 

La expresión hay moros en la costa tuvo su origen en los constantes ataques de los piratas berberiscos a pueblos españoles situados en el Mediterráneo para saquear o secuestrar. Era la voz de aviso para resguardarse del peligro que utilizaba el centinela que vigilaba la costa cuando se acercaban barcos enemigos. Por el contrario, no hay moros en la costa servía para indicar que el camino estaba libre. Luego amplió su significado para advertir que había gente escuchando, sobre todo niños, y tenían que cambiar de conversación. En la familia de Onteniente de mi madre, no la utilizaron nunca, tenían otro sistema más sibilino: hablaban rápidamente en valenciano para que los pequeños no nos enterásemos de lo que decían.

Hay ropa tendida/Tener ropa tendida  

La frase hay ropa tendida la oí por primera vez cuando vine a Madrid, se utiliza en sentido figurado para avisar al interlocutor de la presencia de personas que no deben enterarse de lo que se está hablando. Está claro que no tiene nada que ver con el hecho de estar pasando por debajo de una colada mal escurrida. Los expertos afirman que su origen es  carcelario, proviene de un recurso entre presos que la intercalaban en la conversación cuando se acercaba algún funcionario de la prisión. La ropa tendida en un lugar público simboliza que estamos exponiendo aspectos de nosotros mismos que nos gustaría mantener ocultos

Leyendo el comentario de Raquel Peláez tras la presentación de la nueva novela de Óscar García Sierra, titulada Ropa tendida, que tiene por protagonistas a un aspirante a politicucho enganchado a la cocaína y a una empleada en un asilo, he descubierto la expresión tener ropa tendida que se usa para avisar al que acaba de ir a un baño a meterse un tiro de cocaína de que aún le quedan restos blancos de la droga en las fosas nasales.

Hay pájaros en el alambre 

Hay pájaros en el alambre me parece la frase más brillante de todas y la menos conocida, tiene su origen en México cuando el estado policial recurrió a la práctica de intervenir teléfonos. Es un aviso que apela a la autocensura, se utiliza para advertir de que hay alguien espiando con todos los medios técnicos a su alcance, lo que puede comprometer la seguridad de la operación clandestina. 

Me temo que todas estas expresiones se quedarán viejunas si es que ya no lo están. Ahora en una sociedad democrática nos creemos más seguros, hay más libertad de expresión, no hay tabús ni secretos entre padres e hijos, pero estamos más expuestos y vigilados tanto en nuestra casa como en el trabajo o en la calle. Vivimos rodeados de sofisticados artilugios que nos espían sin que nos demos cuenta: cámaras, teléfonos, ordenadores... Y, lo que es peor, dejamos voluntariamente información de nuestras opiniones y secretos más ocultos en cualquier red social. Ahora el enemigo puede ser incluso un amante despechado y nuestras vergüenzas pueden ser expuestas al público con total tranquilidad como la ropa tendida. ¡Cuidado! Nos conviene ser prudentes. 

domingo, 8 de diciembre de 2024

Se fue la luz

Viñeta de El Roto, 25 noviembre 
 Increíble pero cierto. En el centro de Madrid, después de más de treinta años sin que ocurriera, Naturgy nos ha dejado sin luz a una parte de los vecinos y a las instalaciones comunes (portería, escaleras y ascensor). La avería afectó también a otros edificios del barrio. En 15 días el suministro eléctrico ha fallado dos veces. La primera el día 31 de octubre sobre las 9,30, tardo cuatro horas en venir; la segunda, el 14 de noviembre a las 23,30, más de una hora. Llamamos al servicio de urgencias y averías eléctricas (900 333 999) donde una voz sudamericana nos sometió a un interrogatorio que se cortó varias veces para terminar afirmando que no constaba ninguna avería.

Al principio pensé que era una broma por Halloween o una manera extraña de solidarizarnos con los valencianos porque ahora, si no tienes luz, no tienes televisión ni teléfono fijo, y a esas horas la tableta y el móvil estaban recargándose. Solo te queda esperar a que te venza el sueño y recordar la niñez cuando la casa estaba llena de portavelas con cajas de cerillas porque la luz se iba y venía constantemente de forma mágica o cuando fallaban los plomos en casa o en la centralita de la portería y solo había que bajarlos. 

Primero nos quedamos a dos velas (sin dinero) por el desorbitado precio de la luz  y luego tenemos que encender dos velas para compensarloNo estaría mal que la empresa nos mandase una nota informativa a los usuarios explicando lo que pasó y pidiéndonos disculpas, además de un número de teléfono que nos pusiera directamente en contacto con un servicio técnico que funcione. Espero que no se cumpla el dicho "no hay dos sin tres". 

sábado, 7 de diciembre de 2024

JJ Millás: Váyase usted a paseo. No os volveré a atender

Esta semana me han acosado mañana, tarde y noche (la última fue a las 23 horas) con llamadas por tierra (fijo) y por aire (móvil). En estos casos, el móvil no me ha advertido de que fuese un posible spam. Pongo a continuación los números más insistentes:l

671737629
693126959
34 910 88 36 36
34 698 29 55 22

Y una llamada solitaria de EEUU:
 1 708 -314 -4098

Las llamadas "spam" siguen vivas a pesar de estar prohibidas por ley desde el pasado 30 de junio. Otro gran misterio como el de las subidas y bajadas en el precio del aceite y de la luz. De modo que no puedo estar más de acuerdo con el divertidísimo artículo de J.J. Millás Váyase usted a paseo:
Escuchadme todos los centros de llamadas del universo mundo. No os volveré a atender.
No volveré a coger ninguna llamada de números de teléfono que no estén en mi agenda. Lo juro. Escúchame, Iberdrola. Naturgy, escúchame. Escúchame también tú, Amnistía Internacional. Escúchame, Repsol. Escúchame, Vodafone, Yoigo, etcétera. Escuchadme todos los centros de llamadas del universo mundo. No os volveré a atender. Venía haciéndolo por si era Dios el que me requería. No tengo a Dios en la agenda de mi móvil, de modo que tampoco podía reconocer su número.

domingo, 1 de diciembre de 2024

Los lugares favoritos del comité de empresa en los 80

La entrada anterior (Fotos antiguas de Madrid y Malasaña) me ha hecho recordar los bares y cafés del barrio de Maravillas que fueron cita obligada del Comité de Empresa del Hogar de Empleado a finales de los ochenta. Primero quedábamos en las tascas de toda la vida del barrio para tomarnos unas cañas y algo de comer, para terminar en un café agradable donde tomar un gin-tonic. 


La visita obligada, por su cercanía al metro, era el  Dos de Sagasta
el Vinos porque ese era el nombre que aparecía en las grandes letras de su fachada. La casa, fundada en 1880 por el gallego Pedro López Arias, era famosa por su barra de zinc, su vermú casero y sus canapés de cabrales y sobrasada. Siempre estaba llena de gente, era una odisea conseguir un barril con taburetes para sentarse. Yo la llamaba las tres generaciones porque detrás del mostrador estaban la abuela, la hija y la nieta. Era mejor tomar un botellín porque la forma de lavar los vasos no era la más apropiada. Los propietarios eran muy amables cuando había pocos parroquianos y expeditivos cuando estaba el local lleno que era casi siempre. Cerró en 2022. Supongo que la han traspasado porque en la actualidad sigue prácticamente igual, excepto el letrero que ha pasado a ser Vinos y Cervezas. 

Otras veces, aunque estaba un poco más retirada, íbamos a otra taberna con una decoración muy parecida a la anterior, que todavía se mantiene en el 35 de Augusto Figueroa, la Tienda de Vinos y comidas que todo el mundo conoce por "El Comunista". Afortunadamente sigue  conservando su decoración desde 1890. Cuatro generaciones han estado al frente del negocio. Primero fue solo de venta de vinos y luego se convirtió en casa de comidas.  No se sabe si el sobrenombre de El comunista viene de la asiduidad con que lo visitaban los militantes del PSOE, procedentes de la Casa del pueblo de la calle Piamonte (clausurada en 1939 y demolida en 1953) o de los militantes que se sentaban a los mesas en los años 70.



También acudíamos a la tranquila 
Taberna del Maragato (San Andrés nº 14) en la plaza del 2 de Mayo que abrió en 1871 y cerró en 1999. Su dueño ofrecía comida casera y una educada conversación. El lugar fue ocupado por poco tiempo por la taberna Baztán. 

Para las copas y la tertulias, el  preferido del comité fue el café El Parnasillo que cerró en 2015. Lugar acogedor que como otros cafés de la zona (Manuela, Estar, Ruiz, Ajenjo e Isadora) fue refugio de artistas a finales de los 70 y principios de los 80. Los más noctámbulos acababan en La Vía LácteaEl Penta o Elígeme.