domingo, 17 de marzo de 2024

Historia del teatro de títeres

Un resumen de la historia del teatro de títeres 

El teatro de títeres es un fenómeno histórico, social y cultural que durante siglos se consideró un espectáculo juglaresco destinado al público infantil o al público adulto escasamente exigente, pero a partir del siglo XX ha sido utilizado por las vanguardias para cuestiones más filosóficas. Hoy los títeres están presenten en los grandes teatros y festivales internacionales.

Desde la antigüedad, el hombre ha sentido la necesidad de insuflar vida a los elementos inanimados. De esta forma, el origen de los títeres se remonta casi al momento en el que comenzó a manipular los objetos. El nacimiento de las marionetas está ligado a ceremonias religiosas del Paleolítico y la Antigüedad. En la Edad Media, el cristianismo persiguió el teatro y los muñecos por su origen pagano, aunque posteriormente los utilizó en su beneficio. En el siglo XVI aparecen los personajes populares, figuras que por su arraigo y popularidad ponen de manifiesto la cultura universal. Cervantes se refiere a los retablos de los titiriteros en dos ocasiones, en El retablo de las maravillas, entremés de 1615 y en la segunda parte de Don Quijote de la Mancha, publicada aquel mismo año. En el siglo XVIII, los títeres no sólo se movieron en teatrillos ambulantes, sino que acceden a círculos más selectos de la sociedad. En el XIX siguió interesando a intelectuales y artistas y su proliferación fue tanta que grandes autores escribieron para este teatro. Desde los inicios del siglo XX, el teatro de marionetas empezó a subir en conexión con los lenguajes escénicos; los muñecos se introducen en los medios de comunicación, el cine y la televisión.

Hay muestras por todo el mundo: títeres asiáticos, sombras hindúes, títeres acuáticos de Vietnam, etc. Y películas con títeres, como La guerra de las Galaxias o programas de TV como las célebres Noticias del Guiñol….  Y un personaje casi universal con diferentes nombres según el país: Punch, Polichinela o Don Cristóbal, que representa lo peor del ser humano desde el Medioevo, con argumentos crueles, para un público acostumbrado a los espectáculos duros. Otro ejemplo es la lucha de caballeros con títeres de Italia, Teatro dei Puppi.

El proceso de creación de un espectáculo de títeres específicamente dirigido a los niños fue larga y tiene sus principios con el despegue de la literatura infantil en el siglo XIX, dentro de la cual hay que citar el Pinocho (1883), de Carlo Collodi, que si bien es un cuento que narra la historia de una marioneta de madera, ha quedado incorporado al repertorio mundial del teatro de guiñol. Con las vanguardias también aparece un nuevo modelo de personaje teatral, que presenta una naturaleza ambigua de hombre y muñeco al mismo tiempo.

El títere como metáfora

 El teatro de títeres se define por la presencia de un sujeto —el titiritero— que utiliza una serie de muñecos —de tres dimensiones o de dos— u otros objetos con el ánimo de expresar ideas o emociones al público. Los títeres funcionan como refuerzo de la actividad creadora y poética del manipulador, son solamente un instrumento aunque para el espectador aparezcan como el eje central del espectáculo. El títere, sin el movimiento o la voz que le presta el titiritero, es solamente un muñeco inerte, aunque lleno de potencialidad expresiva,. El titiritero se transforma así en un ser todopoderoso, un dios de la escena que maneja a los títeres a su antojo. Para los amantes del teatro es la aplicación de la metáfora que relaciona al títere con el actor o el bailarín al que se le exigen las cualidades de la marioneta.

Además de ideas estéticas y teatrales, el títere ilustra creencias religiosas y teorías filosóficas. A través de él pueden abordarse temas muy abstractos como la muerte, el tiempo o la vejez. El títere ha contribuido a la renovación y a la actualización del antiguo mito de Pigmalión, en el que la estatua cobra vida, y al de la caverna de Platón, en el que el mundo es descrito como un teatro de sombras proyectadas por títeres.

En el siguiente vídeo, de la mano del Catedrático de Antropología de la Universidad de Granada José Antonio González Alcantud y de las compañías El Espejo Negro y Títeres Etcétera, nos sumergimos en este fascinante universo, en el que arte y artesanía confluyen para sublimar el hecho escénico.

 

Los títeres tienen algo de mágico que atrae a todos los públicos. El teatrillo en el que viven son cajas de música y de luz llenas de historias y fábulas que nos divierten y nos hacen soñar con otros mundos. Los primeros títeres que vi fueron los muñecos de Herta Frankel en la televisión en blanco y negro, pero hasta que no asistí a un espectáculo del famoso titiritero Francisco Porras Serrano en El Retiro, no me dí cuenta de lo que significaba este arte que hace maravillas. Herta Frankel formaba parte, junto a Arthur Kaps, Gustavo Re y Franz Johan, de la compañía de espectáculos  de variedades "Los Vieneses", que consiguieron gran popularidad con sus apariciones en la televisión en los años sesenta. Su muñeco más famoso fue la perrita Marilín, un caniche impertinente y respondón creado por Elvira de Loyzaga. Las pocas veces que he dado clase de teatro, he procurado que mis alumnos se interesaran por esta forma popular de teatro. No lo conseguí, la edad les hacía interesarse más por vivir lo inmediato, sin ningún esfuerzo, a través de las pantallas. 

  



Para saber más 

Francisco J. Cornejo, El títere como metáfora

https://wepa.unima.org/es/mito-del-titere-perspectiva-occidental/


Teatro de títeres en La Abadía: El verdugo de El Espejo Negro.

Los títeres siguen estando de actualidad creando nuevas propuestas escénicas que buscan la dignidad del titiritero. Este mes de marzo del 13 al 24 de marzo, al teatro de La  Abadía llega la compañía estable de títeres El Espejo Negro. El malagueño Ángel Calvente, responsable de la dirección y del diseño y construcción de las marionetas, ha conseguido con El verdugo una propuesta de marionetas para adultos basada en la película homónima de Berlanga y Azcona que respeta la imagen de la España que Berlanga retrató.


Musk y la realidad virtual

 El magnate Elon Musk ha declarado en alguna ocasión que probablemente todo nuestro universo es producto de una especie de programa de simulación por ordenador. Esto recuerda la religión hindú profesada por el premier británico, según la cual todo el mundo visible es falsa apariencia. Son creencias que vienen de muy antiguo, desde las religiones de la India, el velo de Maya, algunas formas de budismo “nihilista”, Platón, los escépticos, Berkeley, Hume… El problema es que dos de los hombres más poderosos del mundo, de los que dependen las vidas de miles de millones de personas, piensan que todo esto es un juego virtual y, por tanto, casi da igual lo que se haga. O bien, al menos, que lo único que hay que hacer es que siga el juego.

Personalmente, alguna vez he sentido, como quizá mucha gente, que estamos atrapados en una especie de red invisible en la que somos como títeres de no se sabe qué superpoder (ya los romanos decían algo como que los dioses juegan con los humanos como con pelotas: Di nos quasi pilas homines habent). Pero esta sensación me ha venido sólo en épocas prolongadas de tensión y agotamiento, afrontando situaciones que me sentía incapaz de superar. ¿Será que estos personajes, Musk y Sunak, sufren horriblemente en sus vidas y eso les lleva a una visión tan entreguista ante el entorno? En su caso más bien puede ser que al llegar a tan altos niveles de poder se sientan por encima de todo el mundo y fuera de la realidad, el viejo principio marxista de que se acaba pensando como se vive.

Hace 50 años una de las Santas Madres del Neoliberealismo declaró: la sociedad no existe, sólo hay individuos. Esto fue el principio del fin, ahora ya ni individuos somos, el sujeto ha desaparecido (somos haces de sensaciones, dijo un filósofo), y las últimas gafas de realidad mixta para ver lo virtual integrado en el entorno “real” se venden por 3000 dineros. Se compra a bajo precio el escáner del iris para gestión de datos. Se puede programar la evolución de las especies. Y una de nuestras dirigentes remata, al fin, a puerta vacía: “Total, se iban a morir igual”.

Por favor, no nos soltemos las manos, es lo único que nos queda.


domingo, 10 de marzo de 2024

Teatro de papel o Teatro de los Niños: más que un juguete

Toy Theather

Desde siempre y en todas las culturas, los niños se han divertido viendo y haciendo teatro de múltiples maneras, con recortables, con marionetas (títeres articulados movidos por hilos) y muñecos para manipular ya sean de guante, de varillas,de sombra o marionetas, generalmente sobre un teatrillo o teatrino. Pero yo desconocía que existiera concretamente un teatro de papel  que se vendía como un juguete con instrucciones para armar y plegar fácilmente en casa. Con él se pretendía potenciar la destreza manual del niño, la habilidad, la creatividad, la imaginación e incluso el arte de la declamación. 

Google vino en mi ayuda y me sumergió en un mundo extraordinario de artistas, coleccionistas y expertos len la materia que son imprescindibles para admirar este artilugio que tiene mucho de historia, literatura y arte:

- Lucía Contreras Flores Teatritos  La página web es una maravilla. La autora lleva prácticamente toda la vida coleccionando teatros de papel de todo el mundo, y en su colección se puede hallar una interesante selección de teatros de papel de fabricación española.

- Luis Ángel Gálvez Teatrillos de papel. Profesor de música que en su blog nos muestra y describe sus colecciones para acercarnos a este apasionante mundo.

El teatro de papel se desarrolló a principios del siglo XIX en Europa cuando se popularizó la pasión por el teatro; por eso decayó con la llegada de la televisión. En la actualidad se pueden contar más de doscientas compañías en el mundo entero que lo utilizan para crear espectáculos contemporáneos:

Danske Dukketeatre,1880


En ese escenario de la ilusión los niños de las clases acomodadas se divertían representando cuentos populares, adaptaciones de obras conocidas e historias inventadas
. Como afirma Lucía Contreras: "Eran el libro con el que se juega, mezcla perfecta entre el recreo escolar y las lecciones, lo imaginado y lo impuesto. El escenario era un reflejo del mundo real por explorar, los decorados, el paisaje por el que moverse, las historias y los libretos, los conflictos de la vida y las palabras que aprender, las luces y la música añadidas, los únicos “efectos especiales” posibles, y finalmente los personajes, el cartoncito a través del cual un niño se transformaba en príncipe, bandido, bruja, criatura o bosque y ejercitaba posibles consciencias de un habitar en el mundo real".


Teatro de papel, más que un juguete

El teatro de papel parece que nació en Inglaterra hacia 1812, gracias a William West, el principal editor e impresor de la época, que realizó la primera producción de estampas de teatro juvenil. Su tamaño raramente sobrepasaba los 50 o 60 centímetros, constaba de varios pliegos de cartulina impresa con la estructura y los decorados de diferentes obras de teatro. Los figurines, a escala de los reales del teatro, se recortaban y eran accionados por tiras de cartón o hierro por el narrador que generalmente se encontraba detrás de la mesa en la que estaba colocado. 

Los teatritos se componían fundamentalmente de dos partes: un escenario, con su embocadura correspondiente, normalmente muy decorada y tendente al clasicismo, y los fondos, bastidores y figuras sobre temas variados que podían intercambiarse. Además se podían comprar láminas para ampliarlos y también textos para representar los grandes clásicos, por ejemplo de Shakespeare – Otelo y Ricardo III- de Dumas – Los Hermanos Corsos-de Julio Verne- La vuelta al mundo en ochenta días, y también cuentos para niños como Aladino y la lámpara maravillosa o La Bella y la Bestia.

Los teatros de papel fueron mucho más que un juguete, a lo largo de la historia numerosos artistas y escritores se interesaron por ellos. Entre los textos que lo confirman aparecen personajes de la talla de Andersen, Lewis Carroll, Frida Kahlo, Oscar Wilde, Ibsen, Chesterton, Jane Austen Richard Strauss, Goethe, Stevenson, Picasso, Dickens, Orson Welles, Federico Fellini... Su poder evocador  aparece en el comienzo de la película de Ingmar Bergman Fanny y Alexander (1982): 

"La imagen de una corriente de agua plateada se funde con la embocadura escénica de un pequeño teatro de papel mientras suena una pieza de Schumann. Así comienza Fanny y Alexander (1982) aquella terrible y fascinante película donde al tiempo que el telón de un teatro de juguete se levanta, su director, hombre y niño desdoblado, nos introduce en una parcela de su vida o quizás tan solo de su memoria: el teatro de una infancia en la que el cineasta forjó sus primeras aspiraciones artísticas, y cuyos sueños y pesadillas alimentan centralmente este largometraje". https://maquinariadelanube.wordpress.com/2011/01/03/teatros-de-papel/

Merece la pena señalar a dos artistas que mostraron un interés creativo sobre esta forma de teatro:

Chesterton 
G.K.Chesterton, novelista inglés (1874-1936), quien crea textos, decorados, personajes y actúa con regularidad.

Hermenegildo Lanz, titiritero, escenógrafo y decorador español (1893-1949), considerado como el primer profesional en utilizar el teatro de papel, con el Misterio de los Reyes Magos. Se presenta por primera vez en 1923 en Granada durante la famosa noche de teatro en la que participaron también Federico García Lorca y Manuel de Falla, y luego en París con la representación del Retablo de Maese Pedro. .


"Teatrins" y El Teatro de los niños de Seix i Barral

Paluzie:Figurins Don Juan Tenorio
En Cataluña, el auge de los teatros de papel se produce en la segunda mitad del siglo XIX, en el contexto cultural y creativo de la Renaixença y el revulsivo que supuso la Exposición Universal de 1888, que impulsó y aceleró el movimiento de las Artes Escénicas. El éxito se debe fundamentalmente a dos editores catalanes y pedagogos (Paluzie y Seix Barral). Hacia 1865, Esteve Paluzie editaba láminas de papel para recortar, representando estampas populares con un marcado tinte catalán que amplió con la producción de embocaduras de decorados y personajes para los "teatrins". Pero la verdadera revolución llegó en el siglo XX con la editorial Industrias gráficas Seix i Barral que comercializó sus productos como Teatro de los Niños. 


Los teatros de papel de Seix Barral tienen varios modelos, los más lujosos eran los BB y venían con una caja, telones listos para montar, personajes ya recortados y libretos de 23 obras. Llegaron a tener 10 modelos de proscenio, innovando con decorados de zonas translúcidas y un sistema de cajas para colgar múltiples telones a la vez. 
Estaban firmados por C. B. Nualart, Carlos Barral i Nualart, padre de los hermanos Barral, que cuidó los detalles y el diseño de forma exquisita.

Modelo CC, (Barcelona. 1917)
En 1917, con motivo de la III Exposición de Juguetes de la Agrupación de Fabricantes, el Teatro de los Niños de Seix i Barral fue premiado por el jurado como el juguete que reunía más cualidades artísticas. Este teatro se siguió fabricando hasta 1953 y sigue siendo en la actualidad una pieza valiosa para coleccionistas de todo el mundo.

En Madrid también hubo dos editoriales que publicaron teatros en hojas: la Editorial Hernando, desde 1902, especializada en material escolar y didáctico. En 1936 fue destruida por un bombardeo y se perdió todo su fondo editorial. La Tijera también imprimió teatros completos con sus libretos, desde 1917 hasta 1962, año en que cerró.

No cabe la menor duda de que estos teatros sirvieron de inspiración a numerosos escritores y artistas plásticos, sobre todo catalanes. El escritor V. Molina Foix recuerda en El teatro recreación y recuerdo el regalo que le hicieron sus padres en 1956: 

Los libros 
Mi entrada en el bachillerato tuvo aparato teatral, no en sí misma, dentro de un colegio de los hermanos Maristas donde yo era un alumno del montón, sino por el regalo que mis padres me hicieron para celebrarla. Un regalo antiguo, de primeros de siglo, aunque a mí me llegó bastante más tarde, exactamente en el año 1956. Entonces, y por algún tiempo después, se vendía en las mejores tiendas del ramo, del ramo de los libros, a la sazón floreciente, un artilugio de extraordinaria belleza y confección catalana, El Teatro de los Niños, que su autor y editor presentaba así: “Juguete educativo que ofrece un doble interés, pictórico y literario; ejercita, instruye y deleita”.
Las instrucciones 
La caja de los teatrillos










El Museu del Joguet de Figueras, en la provincia de Gerona, atesora varias muestras de los teatrillos de Seix i Barral, uno de ellos sirvió de inspiración al polifacético poeta y dramaturgo catalán Joan Brossa (1919-1998).

Lo que me hubiese gustado haber tenido uno de estos teatrillos, cajas de sueños e ilusión, cajas de historias y fábulas, cajas de música y de luz con las que jugar. Ahora se pueden encontrar algunos en tiendas de segunda mano en internet.

Para saber más

- Hannah Emily Gair Teatro de papel
Titirisante 2022 . La exposición El teatro de papel en Tolosa muestra la enorme variedad de formas que este tipo de teatro ha ido mostrando a lo largo de los últimos siglos en prácticamente todas las ciudades donde se imprimieron teatrillos de papel.

Vídeos







domingo, 3 de marzo de 2024

Ciclo Títeres en femenino en El Retiro

 

Durante tres fines de semana, del 2 al 17 de marzo, en conmemoración del Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), el Teatro de Títeres de El Retiro ofrece el ciclo Títeres en femenino, en el que se podrá disfrutar de una selección de espectáculos dirigidos o interpretados por mujeres.

Las funciones serán a las 12:30 h en el Teatro de Títeres de El Retiro. Las entradas son gratuitas, pero hay que descargarlas de la web https://teatrotiteresretiro.es/ (máximo cuatro entradas por usuario registrado). Se pondrán a disposición del público los viernes a las 10:00 h. /

La casa modernista con sicalípticos esgrafiados (vulvas y falos)

Montserrat, 12

En el número 12 de la calle Montserrat, cerca de San Bernardo, se encuentra un pequeño edificio centenario que destaca por su decoración modernista con figuras geométricas de motivos florales y animales que en realidad son símbolos sexuales que pasan desapercibidos si no te lo indican. 

Bajo los balcones, en cada piso hay una pareja de penes muy evidentes y entre ellos aparece una vagina estilizada. En total, 6 penes y 3 vulvas realizados con muy buen gusto. También se aprecia el símbolo del infinito con la fecha de su edificación,1912, y otras insinuaciones de úteros y formas fálicas. En el barrio la llaman indistintamente la casa de los penes, de los genitales o de las pollas. En definitiva, una casa genial. Como curiosidad añadiré que sobre el ático de este edificio, muy bien conservado, ondea una bandera española de gran tamaño. 

El arquitecto

Esta singular edificación fue obra del arquitecto madrileño Arturo Pérez Merino (1897-1939), del que no tenemos muchos datos. Le fue encargado por una señora que quería dedicarlo a pisos de alquiler, exactamente como está ocurriendo  con los pisos de la zona un siglo después. En el Archivo de la Villa se encuentran los planos del proyecto donde aparecían los falos sin que se produjese ningún escándalo.

Hortaleza, 96
 El imaginativo arquitecto es el artífice de otras viviendas para las clases medias en Madrid. Una de sus obras más llamativas es la casa de Hortaleza 96, donde hay unas exóticas ménsulas con forma de serpiente. También en el edificio de Don Pedro, número 4, destaca un dragón que se enrosca sobre el dintel protegiendo la firma del arquitecto, allí nació la conocida actriz Lina Morgan.

La intención

Don Pedro, 4


Queda en el aire la razón de estos sicalípticos esgrafiados que tal vez sean una broma o puro divertimento. Veamos algunas de las explicaciones que se han dado:

- Publicidad de un lupanar.

- Surrealistas influencias freudianas.

- Homenaje al hinduismo con referencias al dios Shiva. 

- Influencia de la Roma clásica donde se colocaban penes erectos para atraer a la buena suerte. 

- Símbolos masones. 

Sea lo que fuere, suponen un deleite visual que ningún madrileño o foráneo se debe perder.

 Partiendo de esta pequeña y recóndita calle se pueden visitar otros edificios modernistas del barrio (Modernismo en Malasaña)


Para saber más:

- Patricia Gosálvez Una fachada genital 

- https://madridfotoafoto.blogspot.com/2011/07/la-casa-de-los-falos.html


viernes, 23 de febrero de 2024

Mi imperfecto arte de conservar (más caro el collar que el perro y aprendiz de todo, maestro de nada)


1. Fase de Optimismo: el plato roto y sus piezas 
Juro por dios que es la última vez que sigo un tutorial de youtube que me obliga a mirar otros sobre el mismo tema. Los youtubers te engañan tanto como los de Bricomanía. Se me rompió en la terraza un plato, no especialmente bonito pero con firma, que mi madre había comprado en Granada. El cordón de yute que lo sujetaba a la alcayata se pasó y el plato voló hasta que cayó roto en múltiples pedazos. Como estaba sensibilizada en el arte de pegar y no tirar (ver entrada anterior El kintsugi, el valor de lo imperfecto, mira que bonito queda), decidí ponerlo en práctica. Los obsesivos somos así, no perdemos nunca la esperanza. Aunque yo sabía de antemano que me iba a salir más caro el collar que el perro, expresión que sintetiza perfectamente lo que el sentido común nos dice: el esfuerzo y los costos asociados a restaurar un objeto superan ampliamente el precio del mismo, sobre todo si eres una manazas como yo.
 
2.  La realidad: el pegamento no funciona 
Llevo una semana dedicada a ello. Primero los utensilios no los tienes en casa, en internet un kit completo cuesta aproximadamente 30 euros, si los compras por separado en tiendas especializadas salen todavía más caros. Voy a restaurarlo con los medios que tengo a mi alcance, me dije. El pegamento que guardaba cuidadosamente en la nevera está casi seco, pero yo termino con los dedos pegados. Parece que con la ayuda de cinta de carrocero y unas pinzas de la ropa se van amalgamando las piezas. Craso error, se desprenden por el peso, utilizo un cuchillo para quitar el pegamento de los bordes, me corto y todo se llena de sangre. Miro otro tutorial que me dice que la silicona líquida unida a la arcilla blanca sirve para unir y rellenar los huecos. Descubro que tal afirmación es verdad en algunos fragmentos, pero no en todos. Vuelta a empezar, me tiene que salir por narices. Compro un pegamento nuevo pero ya no encajan bien las piezas. Finalmente, después de varios intentos, se pegó precariamente y pinté las cicatrices con un espantoso esmalte dorado de uñas. Terminó malamente restaurado. No ha merecido la pena esta reconstrucción low cost del plato que cada vez más se parece a una paella. Menos mal que no era de una vajilla y no hay que comer en él. 

Un ejemplo más de que la vida es un esfuerzo inútil, hay cosas que no tienen arreglo y por tanto hay que desecharlas. Las heridas dejan secuelas y si no se restauran bien y se embellecen, permanecen abiertas en nuestra memoria.  La próxima vez leeré un libro y me dejaré de zarandajas. Aprendiz de todo, maestro de nada que diría mi abuela Ángeles. 


3. Resultado final, tal vez embellecido por el filtro del móvil  


domingo, 11 de febrero de 2024

Silvia Hernando: La menstruación sale del armario

 

Menstruation Myths, 2021 LAIA ABRIL
Proscrita de la conversación pública como algo sucio y vergonzoso, la menstruación y su cese, la menopausia, toman impulso en la producción cultural reciente con nuevos libros, películas y obras de arte

Los poemas menstruales no son novedad, ya en su día los escribió Emily Dickinson, ni tampoco la regla ha sido un aspecto ajeno al arte feminista. Pero ahora está desplegándose una tendencia cultural. No es solo biología. Es una tendencia también literaria, audiovisual, plástica. Ha podido verse en escenas de Saltburn o en la novela La soldada de Paulina Tuchschneider, es leitmotiv en Red de Pixar o motivo de la obra de Laia Abril, galardonada con el Premio Nacional de Fotografía y una de cuyas obras sobre la revisión del imaginario lunar asociado erróneamente a la regla es la imagen de portada de esta semana en Babelia.

Suciedad, asco, indecencia… Debilidad, enfermedad, “estar mala”… Existe una montaña de prejuicios conmiserativos asociados a la menstruación, tópicos denigratorios de una época que ha terminado. No solo es el cambio de sensibilidad que obliga a integrar las miradas tanto tiempo ocultadas, también nuevo conocimiento que se elabora desde ámbitos complementarios: está la perspectiva médica, pero también la política o la económica. Abordarlo con sentido y sensibilidad es lo que se ha propuesto Silvia Hernando al leer nuevos reportajes, ensayos o poemas sobre la cuestión. También sobre la menopausia.


Hay quien podría pensar que visibilizar este nuevo ciclo de la regla es una demostración más del feminismo radical que aterroriza cabeceras progresistas como la nuestra. Es exactamente lo contrario. El terror es seguir queriendo ignorar. No hay mejor herramienta para repensar la vida del cuerpo que el saber, el arte, la literatura. Provocando incluso, como hicieron en su día los poemas en gallego de Lupe Gómez y que acaban de editarse en castellano.



https://elpais.com/babelia/2024-02-10/la-menstruacion-sale-del-armario.html