Con ese tono tan suyo con el que parece que nunca cuenta nada importante, Martínez se refirió así a una escena en la que se masturba en la película: “Lo más importante es haberme masturbado delante de mucha gente, porque pienso que la masturbación está callada. Ahora me masturbo como tres o cuatro veces al día, porque he cogido la manía... Hay muchas cosas que las mujeres de mi edad no sabemos, como el satisfeison [como llamó al satisfyer, el juguete sexual que se ha convertido en un éxito de ventas], que es muy bueno, es genial...” Afirma que por eso al recoger el premio llevó el discurso al territorio de la coña. "Tengo claro que está bien hablar de ello, parece que en la tercera edad no tenemos vida sexual, y no es cierto”. Añade: “Eso sí, es distinta. Y la masturbación hay que reivindicarla, tiene muchas ventajas… No cuesta dinero, no te quedas embarazada si eres joven, no te tienen que dar la enhorabuena… Y los que piensen que no se puede hablar de esto, pues no me importa”. “Yo soy muy novelera, podría dejar de hacer cine y teatro, lo que no podría es dejar de verlo, ni dejar de leer novelas. Ahora somos nosotros, Juan (Margallo, su marido*) y yo, los que estamos al final de una novela. Somos infantiles, nos sentimos sin una edad específica, seguimos haciendo una vida improvisada y eso”, concluye, “es muy bueno”.
sábado, 19 de marzo de 2022
La vida de las mujeres mayores: Anna Freixas y Petra Martínez
miércoles, 16 de marzo de 2022
Javier Rodríguez Marcos: Elogio de los libros que odias a los 15 años
Rosalía con Raül Refree presentanhdo 'Los ángeles' (2017) |
1 El futuro siempre tiene razón. Y dice: alguien de 75 años puede hacer una transferencia en un cajero automático, pero alguien de 15 no puede leer un texto escrito en su propio idioma.
2 Prueba de examen: A. “Te quiero ride como a mi bike / hazme un tape modo spike / yo la batí hasta que se montó / segundo es chingarte / lo primero Dios”. B. “El amor faz sotil al omne que es rudo; / faze le hablar fermoso al que antes es mudo”. ¿Cuál de ellos parece más medieval?
3 El texto A, los menores ya lo han adivinado, es de Rosalía. El B, tal vez lo recuerden los mayores, del Arcipreste de Hita. El primer disco de la cantante ―Los ángeles― incluye una versión de Aunque es de noche, de san Juan de la Cruz. El Arcipreste, por su parte, ha sido invocado como antecedente por una de las escritoras más contestatarias de la actualidad, Cristina Morales, autora además de una novela feminista titulada Introducción a Teresa de Jesús, redactada en un castellano que remeda el del siglo XVI. Cuesta creer que se hayan roto los puentes con el pasado. Por mucho que incomoden las películas en versión original. O en blanco y negro.
4 Hércules y Spiderman son lo mismo: superhéroes.
5 Un reciente estudio sobre la enseñanza de la literatura señala la torpeza de seguir utilizando como criterio la cronología y la nacionalidad. Muy cierto. Sobre todo si se le suma el regionalismo autonómico ―un poeta cacereño en lugar de Cernuda― y se insiste en obligar a los alumnos a memorizar nombres y títulos que olvidan cuando aprueban la EBAU.
6 A eso, nos dicen, hay que añadirle tres problemas: el aislamiento asociado al acto de leer, la longitud de los textos y su antigüedad. No es un tema menor: ahora parecen defectos lo que antes se consideraban virtudes.
7 “Fue escrito por un Balzac medieval. La guerra es para él, ante todo, una empresa financiera. Dado que la guerra es costosa, ésta debe ser rentable. La cabeza del caballero, hasta que alguien se la corta, estaba siempre llena de cálculos”. Así analiza Wislawa Szymborska el Poema del Cid en sus Lecturas no obligatorias. Tal vez Balzac necesite una nota al pie, pero la interpretación “polaca” de la Reconquista no tiene desperdicio.
8 Lo obligatorio es anatema. Sin embargo, a cierta edad lo son las matemáticas y las espinacas. Todo depende de cómo se cocinen.
9 El dilema es este: formar estudiantes para los clásicos o reformar clásicos para los estudiantes. Es cuestión de grados: también Mozart tuvo su Luis Cobos.
10 El pasado siempre es sospechoso. Por eso nos empeñamos en decir que los fenicios eran como nosotros y que Velázquez retrata a la perfección la sociedad actual. Tal vez resultaría más interesante subrayar lo mucho que les debemos y lo poco que nos parecemos a ellos. Como los seres humanos de 15 años respecto a los de 75.
El examen viral de sintaxis: nadie conoce a los Beatles Un profesor extremeño de primero de Bachillerato se hace viral con una prueba de Lengua y Literatura.
viernes, 11 de marzo de 2022
lunes, 7 de marzo de 2022
domingo, 6 de marzo de 2022
Tamara de Lempicka: Los refugiados
Tamara de Lempicka en su viaje por España quedó impactada por el sufrimiento de los refugiados que se iban de España a Francia. Un ejemplo de ello es una de sus obras más sobrecogedora “Los refugiados” de 1937.
viernes, 4 de marzo de 2022
A ratos perdidos con Rafael Chirbes
Es el cuarto hombre, todos idealistas y sarcásticos, que conozco que se ha leído y valorado El hombre sin atributos de Robert Musil. Yo no pude con tamaña novela.
El escritor Rafael Chirbes, en su estudio de Beniarbeig (Alicante) en 2008 |
Selección literaria y sentimental El Cultural.
Enrique Rey, Rafael Chirbes: lo que puede decir un mudo.
PD: Viaje al mundo interior de Rafael Chirbes (9 octubre 2023)
Chirbes cuenta en el tercer volumen de sus inmortales Diarios: “Siento puro rechazo, ganas de estar solo y al mismo tiempo asfixiante sensación de soledad, de no tener nada ni a nadie, ni poder aspirar a nada: No haber tenido capacidad para convivir o haberla perdido".
En los dos primeros tomos de los 'Diarios' el escritor nos contaba su gran mundo exterior: relaciones, amores, aventuras sexuales, los viajes. El tercer y último tomo nos presenta su mundo interior en los ocho años finales de su vida.
Estos últimos años están dominados por su caos interior y su desorden vital que le llevan al insomnio nocturno y a dormitar de día, que le mantiene maniatado, incapaz de escribir y solo leyendo con desgana. Se siente a la deriva y que todo se derrumba a su alrededor. Vive encerrado en su casa de Beniarbeig, con la sensación de que la enfermedad y la muerte estrechan el cerco. Tiene miedo a la vejez, a sentirse dependiente, a no controlar sus ideas o movimientos y siente la necesidad de «trabajar bien el instante en que se abandonan los escombros para volver al polvo». Comienzan y se alargan los episodios de vértigo, la asfixia, el insomnio. Son días de agobio, de insomnio y desgana. Cualquier cosa como la minucia de un pequeño fallo en el coche, hace que se le venga el mundo encima: «lo oscuro ha salido de caza y no se cansa de cobrarse piezas».
Javier García Recio Rafael Chirbes: Viaje a su mundo interior
https://elpais.com/television/2023-09-30/chirbes-te-quiero.html
jueves, 24 de febrero de 2022
Desconectar para conectar (Moby: Are You Lost In The World Like Me?)
Se me ha estropeado la tarjeta SIM y he estado unos días sin poder llamar ni recibir llamadas, aunque sí funcionaba el wifi. Me he dado cuenta de que es más fácil sobrevivir sin amor que sin móvil. Me he acordado del texto de Cortázar Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda a un reloj. Sesenta años después sigue teniendo vigencia sólo hay que sustituir reloj por móvil.
Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.
Julio Cortázar, Historias de cronopios y de famas (1962)
Me gustan tan poco los relojes, ahora llamados inteligentes, como los móviles. Los dos nos atan a una cadena invisible, nos obligan a estar pendientes de un artilugio que nos controla. Además, nos vigilan y nos aíslan. La vida real, lo que verdaderamente importa, es lo que pasa mientras miras el móvil. Lo inteligente es ir a tu ritmo.
En la época de la esclavitud en los Estados Unidos, a los esclavos nuevos se les ataba una bola negra de hierro muy irregular y con deformaciones (no era una bola perfecta, para que no pudiera arrastrarse fácilmente) con una cadena y un grillete al pie, para que no escaparan. La llamaban "BlackBerry" (mora negra) porque se asemejaba a dicha fruta. En los tiempos modernos, a los nuevos empleados no se les puede amarrar una bola de hierro para que no escapen, en cambio, se les da un "BlackBerry" y quedan inalámbricamente atados con ese grillete. Después de la televisión, nunca habíamos estado pendientes de un objeto que nos controlara individualmente. Poco a poco los móviles más sofisticados se han instalado en nuestra vida cotidiana alterando las relaciones personales. Hay que desconectarlos para conectarnos al mundo que nos rodea.
¿Estás perdido en el mundo como yo?
La película de animación Are You Lost In The World Like Me? que circula por las redes no se llama "L'altra part", ni es egipcia, ni ha ganado el premio al mejor cortometraje en el Festival de Venecia: Es un videoclip de 2016 del compositor estadounidense Moby y su autor es Steve Cutts, un ilustrador y animador británico. La película describe cómo las personas se aíslan en la tecnología y olvidan una de las mejores cosas de la vida, la convivencia humana con el amor y la hermandad.