Es lo que tiene el e-book, las lecturas que haces son a ciegas, sobre todo si son gratuitas porque te las ha pasado la amiga de una amiga. Te mandan libros sin portada, sin que puedas hojear el contenido, sin que tengas ninguna referencia del autor. A eso se añade que lees en el metro porque gran parte de tu jornada laboral la pasas allí y sigues la lectura porque no tienes otra cosa que hacer. No recomiendo ni Mañana lo dejo ni El verano sin hombres. Ambos libros los leí porque me gustaba el título, nada más. Han supuesto una pérdida de tiempo, ¡tantos clásicos que leer o revisitar y yo con tonterías que ni siquiera me han entretenido!
El verano sin hombres es una novela feminista
bienintencionada, pero aburrida y previsible. La protagonista ha sido
abandonada por su marido y en ese verano escribe un diario sobre sus relaciones
con mujeres de todas las edades. Siuri Hustvedt es la mujer de Paul Auster. ¿A
qué averiguáis el final?
Mañana lo dejo es una
novela para adolescentes tontorronas que recuerda al diario de Bridget Jones.
La protagonista, torpe y divertida, se ha enamorado (busca desesperadamente su
media naranja) de su misterioso vecino. El libro es tan pastelero que pensé que
lo había escrito una mujer (tampoco escapo de los prejuicios), pero me he dado
cuenta al buscar información para escribir esta reseña que es un hombre. Tal
vez el descubrimiento justifique la visión tan estereotipada de los
planteamientos vitales de la protagonista. Ha sido un éxito de ventas en
Francia, pero no entiendo que le pueda gustar a alguien que tenga más de quince
años. Y el caso es que el comienzo de la novela prometía.