Mariquita es una palabra polisémica que designa tanto a un insecto coleóptero, a un varón afeminado u homosexual, a un baile argentino, a un recortable para niñas y a una muñeca pepona. Todos los significados provienen del nombre de María. Según el diccionario crítico etimológico castellano e hispánico de J. Corominas, Maria se toma como prototipo de nombre de mujer en general, en diminutivo Marica y, en una doble derivación, Mariquilla o Mariquita.
1.- El insecto
coleóptero se identificó desde la Edad Media con la virgen María, ya que muchas
veces era representada con una capa roja y siete puntos negros, que simbolizaban las siete
alegrías o los siete dolores. Los campesinos alemanes e ingleses creían que la
mariquita era un regalo de Santa María contra la plaga de pulgones, y
bautizaron a la mariquita como el escarabajo de María (marieta en catalán, maruxiña en gallego,
Marienkäfer ‘escarabajo de María’ en alemán).
Ilustración de El Guzmán de Alfarache |
3. La Mariquita, nombre de una danza folklórica antigua que se bailaba en los salones cultos de Argentina entre 1.820 y 1.860 y también en los ambientes rurales hasta fin del siglo. Su letra comienza: "Mariquita muchacha / tu madre biene / echale una mentira / antes que yegue" y de ahí ha salido su nombre.
4. Mariquita o mariquitina recortable. El recortable de papel apareció en el siglo XIX en Inglaterra y
Alemania, lugares en los que se utilizaba en las familias acomodadas como
modelos de vestuario y conducta. Un
entretenimiento que consistía en
recortar con tijeras la figura de una persona, generalmente una niña o una
mujer, a la que se colocan diferentes prendas doblando unas lengüetas sobre la
misma.
Las
primeras muñecas recortables de los años 30 en una gran parte de la península
española se llamaban “mariquitas” o “mariquitinas”. La
muñeca Mariquita que era una adaptación de la muñeca americana Dolly Dingle,
creada por la ilustradora Grace Drayton en 1913.
5.- La muñeca Mariquita Pérez, hecha de cartón piedra, con ojos de cristal y pelucas naturales reemplazó a las recortables. Fue la muñeca más deseada por todas las niñas desde los años 40 a los 70, aunque la inmensa mayoría nunca pudo tenerla, ya que su precio equivalía a un sueldo medio, 80 pesetas en 1940. Todo un fenómeno social y económico que se extendió por el mundo y llegó a tener hasta su propia tienda en la calle Serrano número 8. Empezó a fabricarse en Onil (Alicante).
Su origen se remona a 1939, Leonor Coello, hija del Conde Coello de Portugal, tuvo la idea de vestir a la muñeca de su hija con los mismos trajes que le hacía a la niña. Pronto, la pequeña Leonor de Góngora se convirtió en la sensación de las playas de San Sebastián, porque llevaba a su muñeca vestida de manera idéntica. Leonor quería que su muñeca tuviese una personalidad única, una familia propia y un nombre pegadizo y fácil de recordar. Fue así como se les ocurrió que Mariquita (diminutivo de María) era un nombre perfecto. Eligieron el apellido Pérez porque era uno de los más comunes en España y servía para lograr la familiaridad que la creadora buscaba para su muñeca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario