miércoles, 11 de agosto de 2010

Comportamientos disruptivos


Ficha de tutoría que realicé para evaluar los comportamientos disruptivos y poder informar a los padres y al equipo directivo.

Alumno:
Grupo:
Asignatura:

1.-Trabajo en clase:
Trae material: libros, cuadernos, bolígrafos
Hace los deberes en clase
No trae los deberes
Copia lo que hacen sus compañeros
Se sienta en su sitio

2.-Comportamiento disruptivo (Desafía la autoridad, no hace lo indicado)
Llega tarde a clase
Entra en clase armando jaleo
Se pone los auriculares
Canta o hace ruidos
Pide salir al lavabo
No acata las órdenes del profesor
Se levanta del sitio sin permiso
Habla cuando habla el/la profesor/a
Se ríe de un compañero o del profesor/a
Pregunta insistentemente con ánimo de retrasar

3.-Orden
Pinta en las mesas o paredes
Quita cosas a los compañeros
Tira cosas por el aula
Lanza objetos a sus compañeros
Guarda las cosas antes de tiempo sin permiso
Se levanta de clase antes de que suene el timbre

4.-Relación con sus compañeros
Maltrata a sus compañeros/as
Insulta
Se pelea

Galdós: Tristana



Comentario sobre el libro:
http://www.nazaretti.org/csagrera/altres/contenido/fonts/pdfs/tristanaycia.pdf

El personaje de Tristana (capt. V)
http://es.wikisource.org/wiki/Tristana:_05


Trailer de la película de Luis Buñuel


Comentario de texto
»El problema de mi vida me anonada más cuanto más pienso en él. Quiero ser algo en el mundo, cultivar un arte, vivir de mí misma. El desaliento me abruma. ¿Será verdad, Dios mío, que pretendo un imposible? Quiero tener una profesión, y no sirvo para nada, ni sé nada de cosa alguna. Esto es horrendo.
»Aspiro a no depender de nadie, ni del hombre que adoro. No quiero ser su manceba, tipo innoble, la hembra que mantienen algunos individuos para que les divierta, como un perro de caza; ni tampoco que el hombre de mis ilusiones se me convierta en marido. No veo la felicidad en el matrimonio. Quiero, para expresarlo a mi manera, estar casada conmigo misma, y ser mi propia cabeza de familia. No sabré amar por obligación; sólo en la libertad comprendo mi fe constante y mi adhesión sin límites. Protesto, me da la gana de protestar contra los hombres, que se han cogido todo el mundo por suyo, y no nos han dejado a nosotras más que las veredas estrechitas por donde ellos no saben andar..."

martes, 10 de agosto de 2010

Va por ti, Julián Moreiro




Es un buen profesor, un estupendo escritor y una magnífica persona. Todo lo que hace lo borda. Julián es también un español excesivo. Lo conocí en el año 92, yo había dejado atrás el Hogar del Empleado, acababa de aprobar las oposiciones y tuve la suerte de pasar un curso en el IES Ciudad de los Poetas de Madrid, donde él era entonces jefe de estudios. Consiguió que el instituto se transformase por las tardes en un lugar de cultura. Eran otros tiempos y el clima que se respiraba allí no lo he vuelto a encontrar en este eterno peregrinaje que me lleva por toda la Comunidad. Gracias por tu humildad y tu sabiduría. Se está muy bien a tu lado y se aprende mucho, maestro. ¡Ah, te robé el título del equipaje del lector!

P.D. El 30 de septiembre del 2016 he leído en la prensa de Salamanca que ha muerto. No tengo palabras, solo lágrimas porque nos dejas un vacío tremendo.

Cultura y educación: las dos cosas que menos importan a los políticos


Todos los jueves se pueden leer los artículos de Benjamín Prado en El País. Escribió no hace mucho (sobre el 8 de julio):

“No hay barco más peligroso que el que quiere hundir su capitán, y eso es la educación en España", dice Juan Urbano nada más cerrar el periódico, que ha comprado como cada mañana en el quiosco que hay en la esquina de su calle y que acaba de leer en el bar donde hemos desayunado: como saben, él es aún de los que piensan que merece la pena levantarse media hora antes para poder leer la parte que más le interese del diario antes de ir a trabajar, puesto que, según él, "hay que saber lo que sucede para poder saber lo que te pasa". Le miro y veo que tiene un gesto acrobático entre la ira y la resignación, porque acaba de enterarse de que el año que viene los Institutos de la Comunidad de Madrid dispondrán de 1.500 profesores interinos menos, porque la Consejería de Educación ha sacado las tijeras para cortar lo que siempre cortan los políticos cuando la cosa se pone de color hormiga: la cultura y la educación, que son las dos cosas que menos les importan. Antes, cuando una nave se hundía, alguien gritaba eso de las mujeres y los niños primero, pero ahora eso es impensable, porque se consideraría una expresión machista y, a un nivel más ejecutivo, porque lo único que saben gritar los Gobiernos del mundo cuando la crisis empieza a morder es: ¡Los bancos! ¡Los bancos primero! ".

Léxico taurino


Sin entrar en ninguna polémica sobre los toros, lo que no cabe ninguna duda es que taurinos y antitaurimos utilizamos en nuestra lengua habitual multitud de expresiones que tienen que ver con esta fiesta, arte, espectáculo o cómo quiera que se llame. Aquí encontraras http://webs.ono.com/garoza/G4Reus.htm
"una pequeña recopilación de los términos o expresiones que, con un origen estrictamente taurino, se siguen utilizando en las conversaciones diarias".

¿Quién no ha utilizado alguna de estas expresiones en alguna clase?

A MÍ NO ME TOREA NADIE. El torero siempre debe sentirse en disposición de dominar al toro, mediante su valor, su técnica o sus facultades. Cuando ocurre al revés, es que no puede con el toro y, por tanto, llega al fracaso. En sentido figurado, decimos que una persona torea a otra cuando se burla de ella o le falta al respeto. Suele ser señal de cierta bravuconería o firmeza decirle a otra persona esta frase.

ACOSO Y DERRIBO. Es ésta una faena taurina que se desarrolla en el campo y mediante la que se hace caer al becerro para conocer su bravura, tras observar su comportamiento cuando lo acosan. En nuestra habla coloquial se utiliza para indicar que alguien está atacando con sus críticas a otras personas hasta que consigue hacerlo caer de su situación. Se refiere sobre todo a la función política como un procedimiento puesto en práctica por los partidos de la oposición hacia los del Gobierno.

AL HILO DE... Se dice que el toro hace hilo con el torero cuando lo persigue hasta obligarlo a desaparecer del ruedo o hasta que alguien realiza el oportuno quite. Es como si torero y toro estuvieran unidos por un hilo. En la vida ordinaria se utiliza esta expresión para indicar que vamos a decir algo que va unido o que sigue a lo dicho o hecho anteriormente.

AÚPA (ES DE). Con la expresión "los de aúpa" se referían antiguamente a los picadores, que van "encima" del caballo para ejecutar la suerte de varas. Cuando se criticaba a estos profesionales, por evitar su repetición, se nombraban de esta forma y de ahí ha quedado como fórmula para indicar de manera hiperbólica que alguien o algo es malo en general, o que es, como se puede leer en el Diccionario de de R.A.E.L., "de mala condición, violento o desagradable".

BARRERA (VER LOS TOROS DESDE LA). Los toreros son quienes, por estar delante del toro, han de arrostrar el peligro que esto conlleva y han de actuar como crean conveniente en un momento determinado. Los espectadores, que están en la barrera, no se ven en las mismas dificultades y tienen ocasión de meditar y reflexionar sobre lo que van a hacer.

COGER AL TORO POR LOS CUERNOS. En ocasiones el torero, por hacer alarde de su valor y arrojo, agarra las astas del toro y con ello suple las carencias de arte o la imposibilidad de hacer más faena a un toro bronco o difícil o de escasa fuerza y bravura. Es, pues, una demostración de decisión y voluntad. En la vida ordinaria, esta expresión la usamos para indicar que nos enfrentamos a un problema con valor y decisión.

domingo, 8 de agosto de 2010

Análisis de una imagen fija


                                                                                     La imagen comentada

1. Monotonía, frialdad, aislamiento, desagrado ante la visión de la comida superpuesta al individuo.
2. La foto ha sido tomada a través de los cristales de un restaurante o cafetería de comida rápida. Recoge dos imágenes: lo que vemos directamente y lo que refleja el cristal. En el centro de interés destacan dos personajes, un hombre y una mujer que ocultan su rostro detrás de un panel informativo donde aparecen los diversos platos . La pareja, que está sentada e inclinada hacia la comida ajena a la foto y al mundo exterior, es de edad avanzada. A la derecha está el hombre, tiene el pelo blanco, lleva una cazadora de lana y unos pantalones anchos. La mujer es morena, destaca su ancho brazo enfundado en una rebeca sobre un vestido de rayas. Ambos han dejado en el suelo sus pertenencias: la mujer su bolso y el hombre su sombrero. El comedor está vacío. Los techos son altos destacan dos lámparas de cristal distribuidas simétricamente. Hay otras cuatro mesas cubiertas de manteles y sobre ellos copas y servilletas. A la izquierda el perfil desenfocado de un camarero, calvo y con gafas, que ordena una mesa. Las sillas son de plástico, de líneas sencillas. El panel reproduce fotográficamente seis platos combinados dispuestos verticalmente de dos en dos; es de gran tamaño, está enmarcado y la parte superior dispone de luz. La comida es muy parecida excepto una hamburguesa que sobresale por su altura y por el color diferente del plato. El cristal está dividido por dos junturas verticales. En él se ve el reflejo de lo que pasa por la calle: un semáforo, una farola, plantas, la silueta de los edificios frontales con terrazas y persianas, dos coches aparados, la acera de enfrente con el suelo formando un tablero de damas, un transeúnte que pasa andando, la imagen del fotógrafo situado en medio de la fotografía y encima de él un cartel con el nombre de “Stheffany’s” invertido a la altura de los platos inferiores.

La estructura de la foto es fría y estática por el predominio de las formas rectangulares. Destaca el equilibrio de la composición, el encuadre se puede dividir en nueve partes iguales donde los puntos de interés corresponden a la cabeza de los personajes oculta tras el panel informativo. La composición central es estática, predomina el equilibrio la claridad y la armonía en contraste con el mundo de fuera que aparece reflejado en el cristal y que sugiere abigarramiento, movimiento y ruido.

¿El fotógrafo pasaba por ahí o preparó concienzudamente el encuadre? ¿La puesta en escena es una ironía o es producto de una casualidad? Mi lectura es que recogió la soledad e incomunicación de los personajes. El matrimonio, tal vez jubilados, pasaba por la gran ciudad y se sentó a comer a una hora poco propicia, ajeno y alejado al ritmo de la ciudad. Son tan vulgares como el restaurante, están tan muertos como los fletes que comen. El panel oculta sus rostros, pero nos imaginamos su expresión de fastidio, cansancio y aburrimiento. Tal vez se colocaron en esa mesa para que sus rostros no se vieran desde la calle y los platos que les ocultan dicen lo mismo: comida rápida, sin sabor, sin interés, barata. Frente a ellos está la vida de la calle: ruido, tiempo, movimiento, vida. El fotógrafo, distanciado de la imagen ha captado un tríptico de la vulgaridad, un bodegón de naturaleza muerta a través de una composición simétrica y equilibrada, fría y distante.
Al principio pensé que no me gustaba la fotografía, después me di cuenta de que lo que no me gustan eran sus connotaciones, el mensaje negativo que me comunicaba. La realidad profunda que representaba la imagen se convirtió así en una metáfora de la vida. En síntesis, una foto muy original para retratar la trivialidad donde el fondo y la forma coinciden.

3. "Los platos devorando a los comensales", ¿Quién come a quién? o "Silencio, se come".

Ahora busca una foto que te interese y responde a estas preguntas:

1. Escribe en no más de 10 palabras cuál ha sido la primera impresión que has sentido ante la imagen.
2. Haz un análisis de los elementos expresivos y las características de la fotografía.
3. Escribe un pie de foto que no supere las cuatro o cinco palabras y que, en tu opinión, resuma el sentido de la imagen.

Destrucción de Libros


Historia universal de la destrucción de libros
Fernando Baez en la "Historia universal de la destrucción de libros" (Editorial Destino) nos propone un recorrido por la destrucción de los libros, pasto de la voracidad de los insectos, las inundaciones, las llamas, las guerras y sobre todo de la vocación destructora de los fanáticos políticos y religiosos, y de la vigilancia dogmática de los censores. Desde la destrucción de tablillas sumerias al reciente saqueo de las bibliotecas de Bagdad, pasando por la destrucción de la legendaria biblioteca de Alejandría, los grandes clásicos griegos desaparecidos, los desmanes de los inquisidores, el incendio de la biblioteca del El Escorial, la suerte dispar de los libros gnosticos y astrológicos, la quema de libros por los nazis, la destrucición de libros durante la Guerra Civil española, la censura de autores como D.H.Lawrence, Joyce o Rushdie por motivos sexuales o religiosos...
Y es que en todas las civilizaciones y en todas las épocas el libro, como fuente de saber, ha debido luchar contra la intransigencia y la barbarie. Y con razón. Las más grandes revoluciones que han tenido lugar en la historia de la humanidad no han sido las que ocasionan guerras, destrucción y muerte. En absoluto. Las más grandes revoluciones han venido dadas por libros. La Biblia, el Corán, las obras de Kant, de Hegel y de tantos otros han cambiado esencialmente nuestra manera de ver y entender la vida o, lo que es lo mismo, nos sirven para intentar entendernos a nosotros mismos, para intentar encontrar respuestas a las grandes preguntas.
El miedo al libro
Hay otra forma más sibilina de acabar con los libros: el fomento de la alergia o el horror al libro. Esta constante aparece continuamente en la historia de España: la creación del Índice de libros prohibidos, la censura y la persecución de las ideas expuestas en los libros, el exilio de escritores y la quema de libros en la plaza pública o en los sótanos ministeriales.
La Iglesia católica ha manifestado siempre gran desvelo para velar por su dogma, un odio ancestral a la inteligencia y a su manifestación en los libros. La inclinación natural del análisis y la crítica de los seres humanos, las ansias de saber, de aprender eran consideradas, cuanto menos, sospechosas. La mayoría de los de mi generación leíamos mucho, además de porque no teníamos televisión, porque nos lo prohibían.

Para saber más:
http://www.documentalistaenredado.net/149/sobre-la-destruccin-de-los-libros-en-la-historia/