domingo, 7 de mayo de 2023

Iriasara en Pinta Malasaña


En este octavo año de Pinta Malasaña, festival de arte urbano, cien artistas crearán en directo sus propuestas artísticas en los escaparates de locales, instituciones y asociaciones del barrio. Hoy cuenta con la participación de la artista gráfica Iriasara, recién llegada de Berlín, que lo hará en la calle Fuencarral cerca de Tribunal.

Iriasara, así sin apellidos, es la creadora de un mundo propio y sugerente. Se describe a sí misma en sus dibujos y con su lista de aficiones llena de me gusta:

Me gusta el arte y la belleza de los objetos. Me gustan las plantas, los animales y el color azul. No me gusta la fabada, ni tampoco el estampado de camuflaje. Me gusta mi familia, tanto la elegida como la de fábrica. Me gusta cocinar y bailar, no necesariamente en ese orden. Detesto la impuntualidad y los ruidos repetitivos; me sacan de mis casillas. Me encanta la artesanía. Adoro comer, es uno de mis momentos favoritos del día. No me gusta la vagancia y me ponen muy nerviosa las quejas sin fundamento. Me gusta mucho el buen café y sentarme en algún lugar a dibujar como si no hubiera nadie a mi alrededor; me encanta estar sola. Me gusta el orden y la limpieza. No me gusta cuando las cosas no me salen bien a la primera. Me alucina el teatro y me encantan las pelis musicales, pero aborrezco las de acción. Me divierte darle mil vueltas a las cosas. Me gusta viajar, conocer sitios y gente nueva. Me gusta coleccionar (cosas y experiencias) y me encanta organizarme y hacer listas para todo. Me gusta leer, inventar historias y hablar. Hablar me gusta mucho. Me gusta sentir que aprovecho todo mi tiempo libre en proyectos que me ilusionen. Me gustan los chistes malos, beber zumo y la espontaneidad.


Es amiga de mi sobrina Marta, las dos vinieron de Alicante para conocerse en Madrid en la Escuela de Bellas Artes y vivir en Malasaña  Las dos treintañeras comparten risas y energía, bailes y colorido. Con su presencia todo se llena de luz, sonido, no paran de hablar, y de olor porque les encanta cocinar.

Iriasara, nos gustas tú y tus “monaditas”.


Pincha aquí para saber más.



viernes, 5 de mayo de 2023

Grata sorpresa: miles de visitas de EEUU en mi blog

 Desde finales de abril a principios de mayo mi contador del blog está que arde, estoy recibiendo más visitas que nunca. Metiéndome en la trastienda, he comprobado que la mayoría vienen de Estados Unidos y han pinchado en casi todas las entradas desde el comienzo del blog. Sólo me queda dar las gracias a la persona o personas detrás de estas visitas*. Me sorprende mucho que alguien pueda estar interesado en todas las cosas que escribo. 

Aquí dejo dos capturas de pantalla del día 4 de Mayo: Más de dos mil entradas en la semana del 29 de abril al 5 de mayo de 2023. 





*Prefiero no sospechar. No quiero ni pensar en los bots que nos vigilan.

miércoles, 3 de mayo de 2023

Más robos que amores

Ayer sufrí un intento de robo a la vuelta de la compra, cargada con la mochila y una bolsa. En la calle solitaria sentí una presencia silenciosa y de repente un ruido extraño hizo que me volviera. Pegados a mí estaban dos quinquis diciendo: "Señora, que va perdiendo las tarjetas". No dije nada, solo les miré a la cara reteniendo su fisonomía. El silencio era elocuente, yo había cerrado bien la mochila y el monedero estaba a buen recaudo. Las tarjetas que cayeron eran de las bibliotecas, no les interesaron. Mentalmente reconstruí la escena, me siguieron un tiempo, mientras uno sujetaba con sumo cuidado la mochila, el otro abría la cremallera e introducía la mano en el bolsillo interior buscando dinero con tan poca pericia que algunas de las tarjetas cayeron al suelo.

En esta vida he tenido más robos que amores. Afortunadamente los amantes sólo me han robado el corazón, nunca la cartera, así que puedo decir que me han metido más veces la mano en la faldriquera para sacar dinero que para darme placer. Unos y otros han terminado unas veces bien y otras mal. Debo confesar que la autoestima no sale bien saldada en ambos ejemplos. Los robos se han sucedido en todas las edades de mi vida, tanto en la calle como en sitios cerrados, afortunadamente sin violencia física, por hombres de todas las nacionalidades, a la luz del día y por la noche, en todas las estaciones del año. La vida está llena de buscones como en el siglo de Oro, los profesionales del hurto lo hacen al descuido, los desesperados recurren al acoso, a los gritos y a la violencia.

 Lo mejor es olvidar, pero después del suceso de ayer, me he puesto a recordar. 

En total he sufrido unos 15 robos, a algunos de ellos les he dedicado hasta una entrada en el blog. No he contado las veces que he prestado dinero y no me lo han devuelto, ni las veces que han robado a los que iban conmigo. No sé si será la media nacional, o es que tengo mala suerte o muy buena memoria. El único elemento en común es que soy mujer e iba sola, era la víctima perfecta, la edad solo es un complemento. Todos me han hecho sentir muy vulnerable. Educada en un cierto machismo, en casos de acoso de todo tipo, me bloqueo, no sé cómo actuar y nunca salgo airosa de la situación. 

Robos

-Tenía 18 años, robo de monedero en la estación de Atocha. Un grupo de familiares portugueses me rodeó porque estaban introduciendo en el oficio al más pequeño.

- En los años 80, los yonkis te pedían dinero de una forma amenazante, como un impuesto revolucionario que teníamos que pagar todos los vecinos de la plaza del Dos de Mayo. Yo lo pagué tres veces.

 - El  peor: un joven que me había estado siguiendo se introdujo en mi portal detrás de mí. En el ascensor, me amenazó con violencia. La taquicardia y el temblor de piernas me duraron varios días, me sentía vigilada, salía poco a la calle y, siempre, con miedo. 

- Mientras me tomaba una caña en los alrededores de Sol antes del teatro.

- En una terraza de las Vistillas, un mendigo me pedía insistentemente dinero para comer, cuando se fue se llevó consigo mi cartera. 

- En un semáforo de Alicante, un carterista que se ayudaba con un periódico.

- En el autobús 147.

- Unos okupas se introdujeron en mi casa del pueblo, robaron todo lo que había de valor y destrozaron parte del mobiliario.

- En el Corte Inglés en la sección de mujeres. Se llevaron el monedero y el jersey que había comprado. Desde entonces me pregunto si tienen cámaras instaladas y para qué las usarán.

- En el instituto, en la sala de profesores.

- En la frutería de mi calle.

- En la calle Fuencarral, en el cajero del banco.

lunes, 1 de mayo de 2023

Otro milagro de primavera

El orden de las fotos está alterado, hay que recomponerlo 
 
Me regalaron una pequeña orquídea por mi cumpleaños, nunca había tenido una en casa. Duró hasta enero cuando dejó de darle el sol. Estaba a punto de tirarla al compost cuando decidí podarle las hojas. Diez días después, tímidamente brotó un botón minúsculo que se convirtió en un tallo que dio flores a finales de abril. El poder de la naturaleza hacia la luz y hacia la vida emerge con la fuerza de un puño desafiando a los rayos destructores y a los muros opresores. Otro milagro de la primavera que afecta también a los corazones. Ahora solo falta que llueva.




sábado, 29 de abril de 2023

Luis Martín Vigil: El escritor que olía a podrido

 

Yo también, como Muñoz Molina (El depredador benévolo), admiré a José Luis Martín Vigil. La vida sale al encuentro (1955) fue mi libro de cabecera a los 13 años y me despertó el interés por la lectura. Por fin, un escritor comprendía la adolescencia.

En esta novela, un muchacho de quince años nos relata su vida en el seno de su familia, en el círculo de sus amigos y en el colegio donde está interno; todo ello en el transcurso de un año pródigo en contrariedades para él. La descripción es minuciosa en detalles. Se siente su gran admiración por su padre, el cariño hacia su hermano, la total entrega que hace de su confianza en el padre Úrcola... y el amor por su prima. El protagonista posee un corazón grande y un temple magnífico, a pesar de las caídas.

Me llamó la atención que desde la transición no se mencionase su nombre, ya sabemos que los libros más vendidos, no son los más valorados por la crítica. Ahora he descubierto que el escritor olía a podrido. "Un depredador astuto que buscaba la presa más débil en una sociedad oscurantista en la que el sexo es angustia, ignorancia y pecado". "En un piso del barrio de Salamanca, que imaginamos antiguo y cavernoso, Martín Vigil escribía cartas y tendía cebos a adolescentes, a quienes deslumbraba para abusar de ellos". "Martín Vigil era el adulto cargado de conocimiento y experiencia en el que podríamos confiar, porque sabía lo que estábamos sintiendo, nuestro maestro, pero también nuestro cómplice, capaz en caso necesario de guardar un secreto". 

¡Qué horror! Un hombre de apariencia meliflua llevaba dentro todo un depredador atormentado por una sexualidad perversa. Los libros eran trampas para enredar con su tela de araña a sus víctimas. No sé si podré volver a leerlo, en el blog La vida no basta lo ha hecho su autora.

El depredador tiende con destreza su trampa y espera paciente a que caiga en ella la víctima. Su ventaja no es la fuerza física, sino la astucia de elegir la presa más débil


jueves, 27 de abril de 2023

Dominga habla sola ¡y a veces hasta se da la razón!

Paseando por Preciados me eché a reír mientras veía en la FNAC la publicidad de un libro con viñetas y textos de una anciana tierna y gamberra: Dominga. "En estas páginas reflexiona sobre la soledad (la elegida y la obligada), el miedo (como obstáculo y como reto) y el paso del tiempo (que a veces vuela y otras se hace eterno), y a través de ello nos habla de otras muchas cosas, como las emociones, el feminismo, la salud mental o el edadismo. Siempre a través de la ironía deslenguada y la sabiduría que solo alguien que ha vivido mucho puede permitirse".

La ilustradora y diseñadora eldense Elisabeth Justicia es la creadora de este personaje, basado en su abuela con la que compartió casa en Valencia cuando estudiaba Bellas Artes, para dar visibilidad a las personas mayores y a sus problemáticas

A partir de ahora me apropiaré de la genial frase de la portada del libro: Mejor hablar sola que callar acompañada.



Pinchad aquí para ver más viñetas de la autora en Instagram. 


Pinchad aquí para ver en tik-tok el vídeo hecho en el escaparate de la Fnac de Callao.



martes, 25 de abril de 2023

Escribir como se habla, nueva tendencia literaria


Oralidad deliberada, anarquía ortográfica, gramática sui generis, bilingüismo sin complejos y permeabilidad respecto a las múltiples formas locales del castellano. Es el cóctel, casi siempre explosivo, que una nueva generación de autores está agitando con empeño. Tienen mucho en común: no usan comas, puntos o mayúsculas, adoptan la lengua oral como modelo insuperable y toman prestadas formas y expresiones de otras lenguas, ya sean cooficiales o extranjeras. Sus máximos representantes son debutantes en el ecuador entre la veintena y la treintena*, que han asaltado las librerías con pocos meses de distancia con una prosa frenética, caleidoscópica y (estudiadamente) espontánea, como escribe Noelia Ramírez en Escribir como se habla: así es la nueva tendencia en la literatura española.

*Andrea Abreu (Panza de burro); Greta García (Solo quería bailar); Aida González Rossi; Luis Díaz y Andrea Genovart.

Esta tendencia no es nueva, supone una vuelta de tuerca a la frase Escribo como hablo que fue utilizada por el humanista Juan de Valdés para huir de la afectación en la escritura de sus contemporáneos y quedó reflejada en el libro Diálogo de la lengua, que no fue editado hasta 1777:

"El estilo que tengo me es natural, y sin afectación ninguna escribo como hablo; solamente tengo cuidado de usar vocablos que signifiquen bien lo que quiero decir, y dígolo cuanto más llanamente me es posible, porque a mi parecer en ninguna lengua está bien la afectación".